martes, 4 de noviembre de 2008

sin...nada

Dejamos de extasiarnos por las cosas sencillas
y comenzamos a fastidiarnos con los complejos problemas teóricos,
de filosofías rebuscadas,
de sueños utópicos imbéciles,
de la nada...
de la nada...
quisiera despegar de la tierra,
que mis pasos no se marcasen,
que mi rastro no quedara,
ser un ser invisible a tu ojos y a los ojos del resto...
aunque me sorprende como me miras cada noche,
como si no me conocieras,
como si no supieras quien diablos soy.
Perdí las ansias de verte como a un niño pequeño...
no puedo seguir
no puedo..
lloro por tu causa y tu ni siquiera reaccionas,
tu suerte es mi calvario maldito..
Lleguemos lejos como antes
donde nadie sepa de nosotros
donde nadie piense en nosotros,
pero tus manías solo matan mis deseos
de beber de tu soledad
y de revivirte aunque sea en mi pensamiento.

1 comentario:

Pablo dijo...

Desaparecer, existir en un lugar diferente. Puerta para dos, si sigues así llorando. La vida es una puta.

Saludos Berenjena.